Irun fue la cuarta parada de la presentación de la Estrategia Hariak y tuvo una gran acogida entre los iruneses

La presentación de la estrategia Hariak llegó hasta la frontera de Gipuzkoa. Irun fue la cuarta parada del recorrido y las actividades organizadas tuvieron una gran acogida en los alrededores del Museo Oiasso.
El tiempo acompañó y desde primera hora destacó la buena difusión del mensaje entre los iruneses. Los voluntarios y voluntarias obtuvieron bastantes peticiones de información y numerosas adhesiones. Hariak es una estrategia cada vez más conocida entre los guipuzcoanos que se enfrentan al problema de las soledades.
Los iruneses también dieron la cara cuando llegó su turno. Se trata de la ciudad más grande que ha visitado hasta ahora Hariak, y se notó. A las cuatro de la tarde había mucho movimiento alrededor del Museo Oiasso.
Como siempre los talleres fueron las primeras actividades de la tarde. En ellos se mezclaron jóvenes y mayores para trabajar en diferentes manualidades con hilos. Miembros de la asociación de personas mayores de Belaskoenea estaban realizando pompones. Maria, Maria Oliva, Loli, Goyo y Puri, con la ayuda de la voluntaria Uxune, estaban haciendo manualidades y Maria explicó la importancia de estas actividades: “Nosotros a través de Irati supimos sobre la estrategia Hariak”. Irati acude cada día a la asociación a estar con los mayores y su trabajo es, precisamente, ejemplo del decálogo de la Estrategia Hariak.
Hay que recordar que la Estrategia Hariak exige a la ciudadanía el compromiso ante la soledad y está dirigida a la población guipuzcoana de todas las edades. Porque es responsabilidad de todos que las personas mayores no se sientan solas.
Como decía María, las asociaciones de jubilados hacen un trabajo maravilloso en este sentido, pero “estrategias como la de Hariak nos vienen muy bien para comunicar a la gente que somos muchos los que estamos solos”.
María, como muchas personas que viven solas, tiene sus propias estrategias para no sentirse sola: “Estoy apuntada a Tipi-tap. Nos reunimos 28 personas para caminar. Hoy hemos partido de la plaza de Luis Mariano y hemos ido hasta Francia. Hablamos entre nosotros y nos viene muy bien a todos”.
Mientras los mayores y los jóvenes hablaban, Ainhoa Rivera continuó trabajando en el Hilorama. La escultura de hilos, que cada día adquiere un aspecto más bello, estará terminada en Donosti, el 6 de julio.
Fotografías: Luis M. Unciti