Tras recorrer toda Gipuzkoa, la Estrategia Hariak finalizó su presentación en los jardines de Alderdi Eder
El recorrido iniciado en primavera finalizó en Donostia la víspera de San Fermín. La capital guipuzcoana fue la última parada de la presentación de la Estrategia Hariak y, cómo no, fue la más multitudinaria. Tras pasar por Legazpi, Arrasate, Tolosa, Irun, Zarautz, Beasain, Pasaia, Urnieta y Eibar, los jardines de Alderdi Eder de Donostia fueron el último escenario de la estrategia. Junto a la bahía de La Concha y entre rayos del sol terminó la primera fase de la estrategia.
El tiempo no acompañó por la mañana, pero remitió por la tarde en la capital guipuzcoana. Cualquier tarde de julio pasa mucha gente por delante del Ayuntamiento donostiarra y, como consecuencia de ello, los talleres de manualidades ofrecían un buen aspecto desde primera hora de la tarde.
Junto a los bancos estaba instalada la carpa informativa y los voluntarios informaban a los transeúntes que pasaban por ahí sobre la Estrategia Hariak. Cabe recordar que la Diputación Foral de Gipuzkoa y Adinberri han diseñado esta iniciativa para hacer frente a las soledades. En esta presentación de mes y medio los organizadores han querido concienciar a la gente del problema de las soledades. También había que conseguir adhesiones, algo que se consiguió durante la tarde en Donostia: muchas personas se apuntaron para sumarse a la estrategia.
Hilorama
Mientras la gente se paseaba por bancos y talleres, Ainhoa Rivero daba las últimas vueltas al Hilorama y los donostiarras tuvieron la oportunidad de ver terminada la escultura formada por hilos. Rivero comenzó a trabajar el Hilorama en Legazpi y se ha ido formando pueblo a pueblo para dejarlo totalmente acabado en Donostia.

En los talleres, como siempre, los niños estaban haciendo manualidades con los hilos. Al estar situada junto al parque de Alderdi Eder, los talleres atrajeron a muchos niños y ahí estaban Laia y Alain, de 4 y 6 años. Maialen, su madre, se adhirió a la estrategia y, a pesar de estar lejos de la vejez, le da importancia al problema de las soledades: «Todos queremos llegar a la vejez y debemos ser conscientes de que es tarea de todos que las personas mayores sientan el apoyo de toda la ciudadanía».
La tarde se iba quedando cada vez más acogedora. Las tormentas y el ambiente lluvioso de la mañana desaparecieron por completo y Ane Arteche, con su arpa, amenizó más el ambiente. Al son de su peculiar instrumento se adentraron en el Ayuntamiento los que andaban por la zona de Alderdi Eder.






Fotos: Luis M. Unciti